2025 termina como 2024. Un año en el que no han cesado un solo día de alterar y manipular el clima de España con ingeniería climática. Con antenas, radares y fumigaciones aéreas, con productos criminales patentados.
Termina con cientos de explotaciones agrarias y ganaderas arruinadas, hipotecadas, cerradas.
Termina con cientos de empresas arruinadas y cerradas para siempre.
Termina con más parques solares, que ocupan zonas agrícolas y ganaderas importantes, que han arruinado en los últimos años con continuas sequías ejecutadas con ingeniería climática.
En las zonas geográficas donde han implantado estos mega proyectos solares criminales, va a llover poco. Para que los paneles solares sean productivos, necesitan los cielos limpios de nubes, donde brille el sol el mayor número de días al año.
Termina con una industria hidroeléctrica deficitaria, pues en España ya no llueve de forma natural y regular durante el año, como consecuencia de la alteración del clima que el gobierno está ejecutando en toda la geografía nacional con ingeniería climática.
Termina con una superficie de más de 400.000 hectáreas, numerosos pueblos y explotaciones agrícolas abrasadas por el fuego. Por una industria criminal estatal del fuego, que se ha ido creando y perfeccionando desde dentro de la administración del estado en los últimos 45 años. Apoyada por ingeniería climática, que ejecuta el gobierno a través de La Agencia Estatal de Meteorología, dependiente del Ministerio de Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
Termina con numerosas inundaciones en diferentes regiones y puntos de la geografía nacional, que se repiten con el mismo protocolo de ejecución, actuación y visitas políticas de cordialidad. Ejecutadas con ingeniería climática.
Termina con una inflación insostenible para las economías familiares. El euro apenas vale nada.
Termina, otro año más, con más enfermedades nuevas, con mas casos de alzheimer, ictus, canceres diversos, enfermedades crónicas, nuevas “gripes”, neumonías, mas mascarillas... Con una población más enferma, física y psicológicamente. La ingeniería climática y los medios de comunicación, de adoctrinamiento, son criminales. Están haciendo mucho daño.
Termina con una corrupción política, institucional y administrativa, en la que todos los partidos políticos, todos, son juez y parte de la situación a la que han llevado al país y a sus ciudadanos desde 1977.
Así está España, hundida económicamente y podrida institucionalmente. De nosotros depende, que destruyan nuestro país y nuestra forma de vida.
Desde un punto de La Casa de Campo de Madrid, Feliz 2026.
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