google-site-verification=W4JiPUkp_G2kZZVS-o62liN40WEVgPWgCCloRv-xIdc la luz del monte: junio 2018

viernes, 1 de junio de 2018

UN PASEO POR BUITRAGO DEL LOZOYA




El sol comienza a salir entre las montañas de La Sierra del Rincón... Desde Buitrago del Lozoya se ve una imagen irrepetible de esta primavera... De la zona alta del embalse de Puentes Viejas.




En el cielo vuela el milano negro... Anda a la caza y captura del almuerzo, para él y sus pollos.




Salimos de Buitrago por la puerta de la muralla que hay junto al embalse. El origen del castillo es romano, posteriormente es árabe y medieval.




Por el cielo pasa una cigüeña banca en dirección a la dehesa. En la iglesia de Santa María del Castillo y en las inmediaciones, hay varias colonias históricas de cigüeñas blancas, establecidas principalmente en los fresnos y en los edificios históricos.




Por uno de sus caminos nos metemos en El Bosque. Una mancha forestal repoblada principalmente por pinos carrascos y resineros, sobre los restos de un bosque originario de robles albares, melojos, arces de montpellier, fresnos, fresnos comunes, encinas, quejigos, pinos resineros y carrascos. Las orillas del río estaban pobladas de alisos, sauces, álamos temblones, negros y blancos. Un mosaico forestal que pasó a la historia.




El zorro mañanero y madrugador, que viene por el monte a la caza y captura de algún animalillo desprevenido, se asusta al verme y huye entre los árboles...




Los robles melojos ya han terminado de sacar las verdes y agradables hojas. Unas hojas de terciopelo con unas formas muy llamativas...




Por las inmediaciones anda una pareja de mitos con diminutos insectos en el pico. Tienen el nido camuflado en la rama alta de un roble, pegado al tronco.




Sobre las copas de los pinos resineros, las encinas y los fresnos, sobresalen los restos del palacio de Doña Urraca. Una noble señora que fue propietaria de estos montes...




Por las inmediaciones se ven numerosos rabilargos... Muchos de ellos ya se encuentran en el nido incubando los huevos.




En esta zona del monte me detengo unos instantes... Observo los restos de los troncos de dos pinos resineros, con agujeros naturales...




A los pocos minutos se acerca un herrerillo capuchino con insectos en el pico, y se pierde por uno de los agujeros. Al minuto sale del agujero como una bala. Por lo que se ve, tiene el nido.




Los troncos de estos pinos muertos tienen varios agujeros y cortezas, en los que crían y viven numerosas especies de pájaros, pequeños roedores, murciélagos, reptiles, insectos, rapaces nocturnas... Como podemos ver, realmente no son organismos muertos, pues mantienen, dan y crean vida, y ayudan al ecosistema forestal. Esta absurda e ilegal política forestal, lo que está consiguiendo realmente es el exterminio ilegal sin criterios técnicos forestales y ecológicos, de la vida de muchas especies del bosque, que le ayudan en su funcionamiento ecológico.




Al instante aparece una pareja de agateadores comunes... Uno de ellos se lanza a la zona baja del tronco y empieza a subir por él, hasta que llega a una zona con la corteza ahuecada y se introduce por ella... Le esperan los pequeños pollos hambrientos...




Las regulares lluvias y nieves que han caído en el valle del Lozoya, al final del invierno y el comienzo de la primavera, mantienen lleno el embalse de Puentes Viejas...




En una de sus orillas vemos a la elegante garza real. Un ejemplar inmaduro que está de paso.




En una zona poco arbolada del monte, se localizan las antenas espaciales de comunicación...




Estamos en un monte muy ganadero, donde pastan vacas para producir carnes de calidad, y donde pastan vacas y toros de casta muy brava, que también producen carnes de calidad.




En los pequeños valles por los que discurren arroyos, no faltan pequeños bosques de galería poblados por fresnos, espinos blancos, álamos, endrinos, rosales silvestres, arces de montpellier...




En estos ambientes frescos, con los suelos húmedos y blandos, son comunes los zorzales charlos y los mirlos comunes, y una comunidad muy variada de pájaros del bosque.




En el suelo, donde entran los rayos del sol, no faltan las elegantes rosas de los encinares o peonías.




Por el tronco alto de un álamo negro sube un pico picapinos... Va registrando la corteza, capturando orugas, grandes insectos y larvas.




Volviendo hacia Buitrago, me detengo un instante para observar a una pareja de papamoscas cerrojillo, que tiene el nido en una caseta anidadera...




Posado en el tejado, espera el macho su turno para entrar en el nido...
Observando, me viene a la mente una reflexión... Si el medio natural ofrece a estos pájaros agujeros naturales gratis en los árboles muertos ¿porqué los forestales talan estos árboles y construyen casetas con el dinero público? Cortar estos árboles cuesta dinero, sacarlos del monte cuesta dinero, hacer las casetas cuesta dinero, colocar las casetas cuesta dinero...




Saliendo por una de las entradas principales del castillo, me detengo unos instantes para observar el casco histórico...




Al salir, desde la barandilla de un balcón me observa una golondrina... En el alero se encuentra su nido, ocupado por su compañera.