miércoles, 21 de febrero de 2024

LA PRIMAVERA DE LOS MITOS

 

El clima es el factor que determina la vida en cada zona geográfica de la tierra. Las especies de la flora y de la fauna han evolucionado con el y tienen una serie de márgenes naturales para vivir, reproducirse y sobrevivir en las condiciones adversas que puedan surgir en un periodo del año, reponiéndose al año siguiente cuando vuelva la regularidad ambiental.

En este periodo del año, las horas de luz y el calor del sol ya se dejan notar, aunque el invierno sigue marcando sus bajas temperaturas nocturnas y algunas borrascas boreales llegan desde el norte.

El reloj biológico de varias especies de la fauna ibérica, se pone en marcha cuando el otoño está finalizando o el invierno se encuentra a la mitad. Los búhos reales, los cárabos, los buitres leonados y negros, las águilas perdiceras y reales, tienen sus bodas y sus puestas en estás épocas del año.

Son especies grandes, que la evolución les ha capacitado para vivir de los animales que capturan o de la carroña de los animales que mueren.




Según transcurre el invierno, a mediados de febrero o a últimos, las parejas de mitos comienzan la construcción de sus elaborados nidos.

El mito es un pequeño pájaro insectívoro tres veces más pequeño que un gorrión común, con un metabolismo acelerado, que necesita alimentarse durante todas las horas del día que está activo, especialmente en invierno, debido a las bajas temperaturas.

Gracias a las reservas de grasa que acumula durante el otoño, a los escasos frutos que aguanta, pequeñas semillas, pequeñas crisálidas y las puestas de insectos, casi es un milagro que estos diminutos pájaros, permanezcan durante todo el invierno en los montes.

Ese milagro es fruto de la evolución, como consecuencia de la especialización en un nicho ecológico, que esta especie comenzó a explotar hace miles de años en los bosques.

Ahora, cuando falta un mes en el calendario para que entre la primavera, la mayoría de las parejas de mitos ya están construyendo sus elaborados nidos. Con musgos, líquenes, cortezas, telas de araña, pelos de diversos mamíferos y cientos de plumas de varios tamaños, que van a revestir su interior. El macho y la hembra construyen su elaborada casa en unos veinticinco días.




Entre finales de febrero y los primeros días de marzo, la hembra comenzará a poner de seis a doce diminutos huevos. Tras unos catorce días de incubación nacerán los pollos, que van a ser alimentados por los padres con pequeños insectos, durante unos quince días.

En los primeros días de abril, cuando los pollos de las grandes rapaces siguen en el nido, o ya andan roqueros o rameros, y la mayoría de las especies de la fauna ibérica comienzan a reproducirse, los jóvenes mitos ya vuelan por el monte detrás de sus padres, entre los arbustos y los árboles que están floreciendo y echando las hojas nuevas.



SI TE HA GUSTADO EL ARTÍCULO DEJA UN COMENTARIO. DIFÚNDELE Y APÚNTATE AL CANAL. ES LA MEJOR FORMA QUE TIENES DE PROMOCIONAR LA CULTURA.

No hay comentarios:

Publicar un comentario